Todo empezó durante la primera semana de cole. Una de las compañeras preguntó con estas mismas palabras: “Susana, tengo una pregunta interesante: ¿por qué tenemos sombra?" La maestra remitió la pregunta al grupo como suele hacer y escuchar nuestras teorías al respecto. Es curioso y divertido ver cómo ya nosotros mismos levantamos la mano y decimos: “tengo una hipótesis”. Un niño dijo que la sombra nos sigue a todas partes. Como estábamos en clase apagamos la luz e intentamos buscar las sombras: no había, por tanto, no nos persigue siempre. Por tanto, concluimos que la sombra aparece sólo cuando hay luz. Nos pusimos al lado de la ventana a realizar sombras, ¡qué diverido! Cogimos la linterna del rincón de la ciencia: un niño se colocaba delante y levantaba la mano mientras Susana alumbraba con la linterna. ¡Sorpresa! La sombra de la mano del niño se vio reflejada en la pared. SOMBRAS CON EL CUERPO En la pizarra digital vimos varios víde...