El bosque encantado

  Este frasco de la calma o botella sensorial la hemos diseñado especialmente para que parezca una nebulosa. Se ven claramente nubes de colores azules y verdes, estrellas y purpurina.   Lo hice para tenerlo en clase y utilizarlo como bote de la calma. Y así ha sido, lo hemos puesto en nuestra mesa de la paz para cogerlo y observarlo cuando sintamos que lo necesitamos. Así es antes de agitarla.  Luego aparencen las estrellas, la purpurina y las nubes que se abren y se cierran. Nos encanta esta botella, parece mágica la nebulosa.

  Esta es nuestra caja de estrellas. Con ella y una linterna proyectamos las estrellas en el techo de la clase. ¿Quieres saber cómo lo hicimos?   Primero cada uno eligió una constelación diferente. Pegamos estrellitas sobre los puntos marcados. El siguiente paso era picar encono el punzón en el centro de cada estrella.   ¡Listo! Ya tenemos nuestras constelaciones. Cuando las hicimos todas, cogimos la caja de las estrellas que es así por dentro. Colocamos una linterna en su interior y la constelación encima. Nos acostamos en la alfombra mirando hacia arriba. Apagamos las luces y se hizo la magia.    No tenemos fotos porque usamos la linterna del móvil, pero fue muy bonito, sobre todo el "¡guaaaau!" generalizado.    Luego proyectamos en la PDI con el cañón encendido y levantando nuestra constelación.       También probamos a ponerlas en la pared del patio aprovechando la luz del Sol en nuestro taller de sombras que otro día os contaremo